En países europeos y en Estados Unidos, desde hace varias décadas se han venido desarrollando escenarios de cambio climático que se incorporan en las obras de ingeniería para prever y mitigar sus efectos. En Tecnoceano, nos mantenemos a la vanguardia e integramos estos escenarios en nuestros cálculos hidrológicos, conscientes de la gran variabilidad climática observada en los últimos tiempos. Estos cambios han provocado variaciones significativas en los patrones de precipitación y temperatura a nivel global y regional, alterando tanto la cantidad, intensidad, duración y estacionalidad de las precipitaciones como la disponibilidad de agua y el ciclo hidrológico en su conjunto.
Estas alteraciones tienen un impacto directo en los patrones de escurrimiento en las cuencas hidrográficas. En algunas áreas, se ha observado un incremento en la frecuencia y magnitud de los eventos de escurrimiento rápido, lo que ha provocado inundaciones más frecuentes. En otras regiones, la disminución de las precipitaciones y el aumento de las temperaturas han reducido los caudales de ríos y arroyos. Además, la frecuencia e intensidad de eventos extremos como inundaciones, sequías, olas de calor y tormentas severas se ha incrementado notablemente.
Omitir el cambio climático en un estudio hidrológico puede tener consecuencias graves, como la subestimación de riesgos y una proyección incorrecta de fenómenos relacionados con el agua. La falta de previsión de los impactos del cambio climático puede llevar a daños económicos significativos, debido a la destrucción de infraestructuras, la pérdida de cultivos y la necesidad de realizar obras de emergencia o reparaciones. Infraestructuras como presas, canales y sistemas de drenaje que no consideren el cambio climático pueden ser ineficaces o incluso fallar bajo condiciones climáticas extremas, como sequías prolongadas o lluvias torrenciales inesperadas. Las proyecciones tradicionales de inundaciones pueden quedarse cortas si no se consideran los efectos del cambio climático, lo que puede resultar en la construcción de infraestructuras insuficientes o inadecuadas para gestionar estos eventos extremos. Además, no tener en cuenta el cambio climático puede llevar a suposiciones incorrectas sobre la disponibilidad de agua en el futuro, afectando la gestión del agua para riego, consumo humano e industrial, y generando escasez y conflictos por el uso de los recursos hídricos.
En Tecnoceano, nuestros estudios hidrológicos combinan métodos tradicionales con escenarios de cambio climático basados en Modelos de Circulación General (MCG) y Modelos Climáticos Regionales (MCR). Estos modelos proyectan cambios futuros en el clima considerando factores como el aumento de la temperatura, las variaciones en los patrones de precipitación y la frecuencia de eventos extremos. De esta manera, ayudamos a diseñar estrategias de adaptación y mitigación más resilientes.
Con este enfoque, eficientamos la capacidad de anticipar y mitigar los impactos de eventos extremos, desarrollando estrategias de adaptación más efectivas y optimizando el uso y la conservación del agua. Nuestra planificación proactiva y basada en evidencia nos permite asegurar un suministro de agua sostenible y resiliente frente a los desafíos del cambio climático. Además, promovemos la innovación en tecnologías de gestión del agua, impulsando soluciones más inteligentes y sostenibles para la infraestructura hídrica y la protección de los ecosistemas acuáticos.